Traduciendo los sentimientos

lunes, 31 de mayo de 2010

Un amigo, un poema

Hoy un poema de mi entrañable amigo Manuel, de Asturias.

EL ATRACO

Me han atracado justo en la cocina

sin navaja, revólver, ni armamento

tan sólo con un simple documento,

legalmente expedido en la oficina.

Inspección del butano y de rutina

el inspector revisa muy atento

me coloca una goma en un momento

y la labor, concluye y se termina.

Rellena unos papeles muy legales,

esperas que te entregue la factura,

que supones minucia de dos reales,

pero el ¡tío! con mucha cara dura,

por la goma y minutos laborales,

te deja la cartera en sepultura.

He blindado mi puerta con acero

en vista del aumento de ladrones,

que pululan por todos los rincones,

para dejarte limpio y sin dinero.

Cerraduras me ha puesto el cerrajero,

dobles bisagras, verjas y listones,

una alarma que suena de cojones,

un bunker es mi casa, no exagero.

Más a pesar de todo este tinglado

tan amplio, tan seguro y efectivo,

no he conseguido verme liberado

de un caco con carnet de ejecutivo,

inspector de butano, acreditado,

para el que no encontré dispositivo.

No hay comentarios: