Algunos suenan especialmente bien cuando me acompañas:Caminar, viajar, comer, dormir, abrazar, soñar, mirar, besar, amar...
Ah, donde se quedó aquello de aprender los verbos de memoria y sin pensar en su sentido solo porque había que aprobar un examen después del recreo.
Cuántas frases construidas para practicar los distintos tiempos que ahora, alcanzan su máxima expresión:
Desde que te conocí, caminé de tu mano.
Comíamos los frutos del árbol de cada estación.
Abrazándonos aprendimos a identificar el sonido de nuestros cuerpos.
Si me miras a los ojos, mi ombligo se llena de risa.
Seguiremos viajando por el universo en busca de nuevos senderos que recorrer.
También durmiendo puedo sentir el caricia de tu piel.
Te besaré cada mañana a la salida del sol y cada noche, con la llegada de la luna.
Sueño tus ojos mediterráneos y me pierdo en su iris de color indefinido.
Ámame cada segundo. No dejaremos que termine este éxtasis.
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